Un ataque de criptojacking es una técnica utilizada por los ciberdelincuentes para secuestrar el poder de procesamiento de la CPU de un usuario sin su conocimiento o consentimiento para minar criptomonedas. Este tipo de ataque se lleva a cabo mediante la instalación de software malicioso en el sistema de la víctima, lo que permite al ciberdelincuente utilizar el poder de procesamiento del equipo para minar criptomonedas, como Bitcoin o Monero.
El software malicioso utilizado en los ataques de criptojacking a menudo se distribuye a través de sitios web maliciosos, correos electrónicos de phishing y anuncios maliciosos. Una vez que el software malicioso se instala en el sistema de la víctima, comienza a utilizar el poder de procesamiento de la CPU para minar criptomonedas en segundo plano sin que el usuario lo sepa.
Los ataques de criptojacking pueden tener un impacto negativo en el rendimiento del sistema de la víctima, ya que la minería de criptomonedas requiere una gran cantidad de poder de procesamiento. Además, la minería de criptomonedas no autorizada puede tener implicaciones legales y éticas, ya que se utiliza el poder de procesamiento de la CPU de otra persona sin su conocimiento o consentimiento.
Para protegerse contra los ataques de criptojacking, los usuarios pueden tomar medidas como la instalación de software antimalware, la actualización de los navegadores web y la adopción de prácticas seguras de navegación en línea.
En resumen, un ataque de criptojacking es una técnica utilizada por los ciberdelincuentes para minar criptomonedas utilizando el poder de procesamiento de la CPU de la víctima sin su conocimiento o consentimiento. Los usuarios pueden protegerse contra los ataques de criptojacking mediante la implementación de medidas de seguridad y la adopción de prácticas seguras de navegación en línea.
A continuación se presentan algunos enlaces externos que pueden ser útiles para obtener más información sobre el ataque de criptojacking: