La fuga de datos es una violación de seguridad en la que información confidencial, como nombres de usuarios, contraseñas, números de tarjeta de crédito o datos personales, es robada o expuesta por un individuo o entidad no autorizada. Las fugas de datos pueden ocurrir por diferentes motivos, como errores humanos, brechas en la seguridad digital, ataques informáticos, mal uso de datos por parte de empleados o terceros, entre otros.
Las consecuencias de una fuga de datos pueden ser graves, incluyendo robo de identidad, pérdida de la confianza del cliente, sanciones legales y financieras y daño a la reputación de la empresa. Por lo tanto, es vital que las organizaciones tomen medidas para evitar y detectar posibles fugas de datos.
Algunas medidas que se pueden implementar incluyen:
A continuación, algunos enlaces de interés para obtener más información sobre la fuga de datos: